La Dirección Central para los Servicios Antidroga, instituido en 1991, en el seno del Departamento de Seguridad Pública, conmemora este año su trigésimo aniversario. En proximidad de la celebración del “Día Mundial de la Lucha contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas, el 18 de junio de 2021, fue publicado el Informe Anual, que resume los resultados de la labor policial realizada en nuestro país en 2020 en la lucha contra el tráfico ilícito de drogas.
El informe fue presentado por el Director de la Dirección Central para los Servicios Antidroga, Teniente General de la Guardia di Finanza, Antonino Maggiore, durante una ceremonia, que se llevó a cabo en el Salón De Sena de la Dirección Central de la Policía Criminal.
El 2020 se caracterizó por una crisis sanitaria ocasionada por el brote epidémico de COVID-19. Las medidas de contención adoptadas a nivel mundial para hacer frente a la propagación de la enfermedad que limitaban la libertad de circulación con la consiguiente contracción del comercio internacional, tuvieron un impacto muy relevante en las dinámicas del narcotráfico que, como se sabe, se sirve del comercio transnacional de mercancías para trasladar ingentes cantidades de droga.
El levantamiento de las medidas de contención a partir del segundo semestre de 2020 y la capacidad de adaptación de las organizaciones criminales al nuevo contexto socio-económico, han dado lugar, tras un periodo de baja, a un marcado incremento del tráfico ilícito de drogas.
La respuesta de las fuerzas policiales ha sido eficaz e inmediata: el número de operaciones antidroga coordinadas y realizadas con el apoyo de la DCSA (23.000), se mantuvo en línea con el promedio de operaciones de los últimos diez años; 33.000 sujetos denunciados ante la Autoridad Judicial por delitos de droga y 58 toneladas de droga incautada (un 7,41% más que en 2019).
El dato más sorprendente fue el de las incautaciones de cocaína que registraron la cifra récord de 13,4 toneladas, que corresponde a un aumento de 62,2% respecto a 2019, año en el que ya se había registrado el mejor dato histórico con 8,2 toneladas.
En la mayoría de los casos, las incautaciones se realizaron en los puertos y, casi la mitad, en el puerto de Gioia Tauro. Los datos de los primeros meses de este año corroboran esta tendencia, con un nivel constantemente elevado de incautaciones de cocaína. El análisis de las investigaciones evidenció, además, un posible cambio en las rutas de tráfico de cocaína. En este nuevo entorno, Italia se ha convertido en uno de los nudos principales del tráfico de la península balcánica, como prueban las numerosas entregas controladas internacionales hacia países de esa región donde operan grupos criminales organizados que han consolidado su papel protagónico en el narcotráfico, forjando alianzas con los cárteles suramericanos. La ´ndrangheta calabresa reafirma su hegemonía en los circuitos mundiales del tráfico internacional de cocaína actuando con la complicidad de las organizaciones mafiosas italianas y otros grupos criminales extranjeros.
El cannabis, a pesar de la fuerte contracción de las incautaciones respecto al pasado, es, en absoluto, el estupefaciente que ha registrado la mayor cantidad de incautaciones con 29,6 toneladas y más de 414.396 plantas de cannabis, lo cual significa que la demanda del cannabis sigue siendo elevada.
Las incautaciones de heroína se han mantenido estables si se considera el promedio de los últimos cinco años, alrededor de media tonelada, aunque han disminuido respecto a 2019.
El aumento cuantitativo de las incautaciones de drogas sintéticas en 2020 fue extraordinario: más de 14 toneladas de anfetamienas incautadas durante una maxi operación en el puerto de Salerno que, muy probablemente, iban a ser distribuidas en varios mercados europeos. El consumo de drogas sintéticas en nuestro país, actualmente limitado y no comparable al de las drogas tradicionales, está aumentando sobre todo entre los jóvenes que utilizan el potencial de la web y de las redes sociales para comprar sustancias en mercados virtuales, con entrega a domicilio (repartidores u otras formas inusuales de camuflaje).
En 2020, las fuerzas policiales interceptaron 33 nuevas sustancias no fiscalizadas que serán incluidas en las listas de las sustancias prohibidas.
Un dato importante del 2020 fue el de las muertes por sobredosis que, después de tres años de incremento continuo, totalizaron 308 (66 menos que en 2019, lo cual equivale a -17,65%).
El narcotráfico se confirma como «el principal motor de todas las actividades ilegales llevadas a cabo por los grandes grupos criminales», con enormes beneficios que se blanquean y se utilizan para autofinanciar otras actividades ilegales.
Continúa la excelente y eficaz colaboración internacional en materia de narcotráfico con Organismos internacionales y Países europeos y extra-europeos, llevada a cabo a través de la implementación de los Memorándum Operativos Antidroga (MOA), protocolos técnicos que tienen como finalidad incentivar las operaciones especiales antidroga.
Significativo ha sido el aporte de los Agregados Policiales desplegados en las regiones más estratégicas del narcotráfico, tanto desde el punto de vista de la información como de la promoción de iniciativas de cooperación con los Países de producción y tránsito de drogas.
En 2020, se han seguido desarrollando los Proyectos “ICARUS” y “HERMES”, fruto de la colaboración interinstitucional entre la Dirección Central para los Servicios Antidroga y el Departamento para las Políticas Antidroga de la Presidencia del Consejo de Ministros, en materia de prevención y reducción de la demanda y oferta de drogas. En el marco del proyecto “ICARUS” se ha puesto en marcha el proyecto “Ruta del Sur”, junto con la Dirección Central de la Policía Criminal e Interpol, para intensificar la cooperación policial con los países de África sur-oriental, nueva zona de tránsito de la heroína producida en Afganistán. En el ámbito del proyecto HERMES, se han fijado las directrices de los nuevos métodos operativos para combatir la comercialización de drogas sintéticas a través de envíos postales, transportados por empresas de mensajería y paquetería públicas y privadas. Los resultados de este proyecto contribuirán a fortalecer el Sistema Nacional de Alerta Precoz del Departamento para las Políticas Antidroga.